Se define al acoso cibernético como el uso de la
información electrónica privada o a través de los medios de comunicación que pueden ser
correo electrónico, redes sociales, blogs, mensajería instantánea, mensajes de
texto, teléfonos móviles o sitios en internet con el fin explícito de difamar, acosar a un individuo o grupo de personas,
mediante ataques personales a su persona o credibilidad, el cual constituye un
delito cibernético.
De manera
indirecta, cuando una persona pide a otros que ejerzan acciones difamatorias o
humillantes sobre otras personas, por ejemplo a través de medios de
comunicación.
Compartiendo
mensajes, fotografías que humille o difame a una tercera persona, ya sea
conocida o no, pues se apoyan acciones violentas contra una persona o un grupo
de personas. Para conocer un poco más sobre el tema.
Al igual
que el ciberbullying, el ciber acoso no es un juego de niños. Las personas
llegan a tal grado de desesperación ante los ataques que la salud se puede ver
alterada de manera crónica debido al stress, y algunos llegan a suicidarse por estas acciones. Es por ello que quienes lo ejercen
deben ser considerados criminales.
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